Pues bien, a diferencia de muchas otras banderas, la senyera tiene una história propia. Una leyenda que nos recuerda el origen de la bandera que nos representa.
Según se cuenta, la leyenda se atribuye al condado "Guifré el Pelós" (siglo IX) a su origen. Guifré fue un magnifico soldado de la época, que vengó la muerte de su padre, y un comandante aún mejor que desarrolló magnificas campañas militares que permitieron la repoblación de los francos y que marcaron además la frontera con los árabes.
En una de sus gestas, venció una batalla importantísima con sus fieles francos sobre los normandos. Ésta victoria fue reconocida por el mismísimo rey "Carles el Calb" (quien luchaba a su lado) y premiada con la entrega de un escudo de oro.
A partir de ese momento, todas las tropas fieles a Guifré, traían consigo un escudo dorado (pues no tenían ninguna bandera ni color que les representáse). Y su fama de soldado invencible crecía día a día en los comentarios de los enemigos.
"Llop Ibn Muhammad I", señor musulmán de Lérida, se sintió amenazado por las campañas de Guifré y Carles, así que decidió amurallar y proteger la ciudad de Lérida. Ésta decisión no gustó nada a Guifré, quien se sintió ofendido. Así que decidió organizar el ataque a Lérida para engrandecer su leyenda y ampliar el territorio "catalán", en la batalla de "Navès".
En ésta resultó herido. Una herida profunda le condenó a la muerte, y fue "Carles el Calb" quien entristecido, bañó los cuatro dedos de la mano (índice, corazón, anular y meñique) en la herida de Guifré, y con su sangre tinto por encima del escudo las cuatro barras de la senyera.
Tras su muerte, y honrando la leyenda del héroe catalán, los soldados pintaron en sus escudos las cuatro barras, identificándose así con esta bandera.
En la actualidad la senyera la comparten (con variaciones) el País Valenciano, las Baleares y Aragón. Y a menudo la podemos ver horizontal, aunque su origen es claramente vertical.
Faltan fuentes.
Més val ocell a mà que mil volant.
Que en seria de la Corona d'Aragó si hauriem guanyat aquella baralla ningú ho sap ni ho sabrà suficient motiu per refloxionar adonar-nos de lo gran que n'és la nostra patria i enorgunyir-nos de la senyera.